Alguna vez te conocí y tu a mi. Crecimos y compartimos todo aquello que ocurre sólo una vez. No sabría decir si nuestro lazo fue perfecto pero gran parte del tiempo lo parecía, excepto quizás por esos meses de verano en que dejábamos de vernos; tu partías al sur, siempre al sur, y yo nunca tenía muy claro qué haría todo ese tiempo. Pero comenzaba otro ciclo y todo parecía haber quedado donde mismo. No tengo claro tampoco en qué momento nos perdimos, en qué momento tomamos caminos que se fueron alejando cada vez más. En algunas ocasiones nos encontramos y cada una de esas veces yo volví a creer que, tal como cada comienzo de año, las cosas seguirían siendo iguales... tal como las dejamos. Pero pasaba el momento y, con dolor, me daba cuenta de que eso era una ilusión. En fin, nuestros caminos cada vez se alejan más, pero yo te sigo queriendo, porque te quise y eso no cambiará.
No hay comentarios:
Publicar un comentario